Peregrinos del reino celeste,
hoy, con nuestras plegarias y cantos,
invocamos a todos los santos,
revestidos de candida veste.
Éstos son los que a Cristo siguieron,
Y por Cristo la vida entregaron,
En su sangre de Dios se lavaron,
Testimonio de amigos le dieron.
Sólo a Dios en la tierra buscaron,
Y de todos hermanos se hicieron.
Porque a todos sus brazos se abrieron,
Éstos son los que a Dios encontraron.
Desde el cielo, nos llega cercana
Su presencia y su luz guiadora:
Nos invitan, nos llaman ahora,
Compañeros seremos mañana.
Animosos, sigamos sus huellas,
Nuestro barro será transformado
Hasta verse con Cristo elevado
Junto a Dios en su cielo de estrellas.
Gloria a Dios, que ilumina este día:
Gloria al Padre, que quiso crearnos,
Gloria al Hijo, que vino a salvarnos,
Y al Espíritu que él nos envía. Amén.
(Bernardo Velado Graña)